El Presidente de FECLIBA , Lic. Néstor Porras, explica que con el comienzo del COVID-19 las clínicas se mantuvieron abiertas, aunque vieron disminuido su trabajo en un 70% aproximadamente - entre Piso, Unidad de Terapia Intensiva y demás servicios que componen a un sanatorio; además de estudios ambulatorios, y consultas médicas- es decir, un fuerte impacto de desfinanciamiento para el Sector que debe mantener su estructura y además hace un gran esfuerzo para conseguir insumos para protección y la adecuación de los circuitos internos, dando cumplimiento al protocolo desarrollado por el Ministerio de Salud para el debido cuidado de nuestro equipo médico y personal además del paciente con esta patología.
"El temor ocasionado por este virus llevó a la retracción de la propia gente, a no asistir a los establecimientos de salud, por miedo al contagio, descuidando su atención medica, lo que es motivo de preocupación. La gente debe entender que todas las patologías por menores que sean si no se tratan o controlan pueden desencadenar en resultados no deseados. Hoy, sí hay un verdadero cuidado y cumplimiento de protocolo, es precisamente en un establecimiento asistencial, la gente debe retomar el hábito de volver a sus tratamientos o consultas habituales" cuenta el Lic. Porras.
Por otro lado, nuestro sector se encuentra en permanente interacción con Ministerio de Salud de Nación y Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires, los cuales brindan constante información epidemiológica o posible nuevas alternativas de tratamiento a los equipos médicos de nuestra Red Prestacional.
Respecto al diálogo que FECLIBA mantiene con los distintos Ministerios de Salud, tanto Provincial como Nacional, la Superintendencia de Servicios de Salud, más la Obra Social IOMA, es constante y muy fluido, y debemos destacar la muestra permanente de colaboración y reconocimiento para con nuestro sector que viene muy golpeado desde hace tiempo.